Durante los últimos años la preocupación de las personas sobre el impacto medioambiental de nuestros hábitos de consumo y movilidad ha incrementado exponencialmente. La sociedad está tomando conciencia y cada vez demanda más responsabilidad a las instituciones públicas y a las empresas. Éstas deben responder con regulaciones, procesos de producción y productos que ayuden a frenar el cambio climático.

Somos conscientes de que no va a ser fácil. Pero si algo nos han enseñado estos últimos duros meses, es que hay comportamientos que si se pueden cambiar. Estas son las lecciones aprendidas durante el confinamiento según la European Mobility Week:

1- Los espacios públicos son un precioso bien común.

2- Los trabajadores esenciales tienen un mayor valor para todos nosotros.

3- El aire se volvió más limpio debido a los cambios de hábitos en la movilidad de las personas.

4- Nuestro ritmo de vida es demasiado rápido.

5- Un estilo de vida saludable para nuestro sistema respiratorio y cardiovascular es más importante que nunca.

6- Trabajar desde casa ahora es una realidad tangible.

7- Llevar a niñas y niños al colegio en bicicleta o andando se convierte en una opción realmente viable y necesaria.

8- Las herramientas digitales son esenciales en la elección de medios de transporte más seguros y menos masificados.

9- La compra online es imprescindible y cómo transportarlo también, las bicicletas eléctricas ganan relevancia.

10- Hay persona más vulnerables que otras, hagamos de nuestras ciudades un lugar accesible para todas las personas, sea cual sea su condición.

El futuro está en nuestras manos. 

Es evidente que el futuro, la tecnología y la movilidad sostenible van de la mano. La importancia de nuestros actos, nuestros hábitos y costumbres diarias de consumo pueden marcar la diferencia. Los pequeños gestos son responsabilidad nuestra como individuos, no debemos caer en la autojustificación: «la sociedad es así y no puedo cambiarla», esto no es más que una excusa para eludir  la realidad. Cada uno de nosotras y nosotros formamos la sociedad, y podemos moldearla con nuestras acciones y comportamientos.

Pequeñas cosas cómo no comprar productos envasados en plásticos, coger la bici o anda en vez de ir en coche al supermercado o al trabajo. Hay muchas maneras de ayudar para tener un menor impacto medioambiental

¿Trabajamos unidos para un mundo mejor?

¡Lo necesitamos!